En este día de 1938, Adolf Hitler instituye la Cruz de la Madre, para alentar a las mujeres alemanas a tener más hijos, que se otorgarán cada año el 12 de agosto, el cumpleaños de la madre de Hitler.
El Reich alemán necesitaba una población sólida y creciente y alentó a las parejas a tener familias numerosas. Comenzó tal aliento temprano. Una vez que los miembros del ala de la rueca del movimiento Juvenil Hitler, la Liga de Niñas Alemanas, cumplieron 18 años, se convirtieron en elegibles para una rama llamada Fe y Belleza, que capacitó a estas niñas en el arte de convertirse en madres ideales. Un componente de ese ideal era la fecundidad. Y así, cada año, en honor a su querida madre, Klara, y en memoria de su cumpleaños, se otorgaba una medalla de oro a mujeres con siete hijos, una de plata a mujeres con seis y una de bronce a mujeres con cinco.